"Magic" Johnson, José Francisco Molina, Lance Armstrong, Iñaki Azkuna, María San Gil... tantos personajes públicos -deportistas, políticos- han anunciado que padecen una enfermedad y que están dispuestos a luchar contra ella, que el anuncio de Maragall no es algo excepcional.
El ex presidente de la Generalitat de Cataluña ha anunciado esta mañana que padece Alzheimer, y ha expresado su voluntad de luchar contra la enfermedad y colaborar para eliminar los prejuicios y estigmas que la rodean.
"Hicimos los Juegos Olímpicos, aprobamos y refrendamos el Estatuto y ahora iremos a por el Alzheimer", ha dicho durante su visita a la Unidad de Alzheimer del Hospital Sant Pau de Barcelona, donde está siendo tratado.
Ánimo para Maragall en este momento decisivo de su vida, que él afronta con optimismo.
No soy tan optimista respecto a la actitud de ciertos medios respecto a esta cuestión privada que Maragall ha convertido en pública con un valeroso gesto.
¿Cuántos tertulianos asociarán su enfermedad a sus desvaríos verbales y/o políticos de los últimos años? ¿Y cuántos compañeros (bueno, excompañeros, porque Maragall ha dejado el PSC) estarán cerca de él en este último tramo de su vida?
Sería ideal que nos quedáramos con la dimensión humana de la cuestión. Ah!, y que los programas del corazón le dejen en paz.
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