La asociación sin ánimo de lucro X -que opera en un sector económico Y- organiza una jornada de trabajo en una capital de provincia Z. Una de las emisoras locales -perteneciente a un gran grupo radiofónico privado- cursa la siguiente propuesta a la asociación: hacemos el programa local -de 12 a 14 horas- en el lugar donde se celebra vuestro encuentro... si nos pagáis 2.700 euros + IVA.
Aclara la emisora que el programa va a mantener su formato habitual -secciones fijas, desconexiones publicitarias- pero que dedicará el resto del tiempo a "entrevistar en directo o telefónicamente a los ponentes, organizadores, o personas que la organización considere oportuno". Fija la emisora en diez el número máximo de personas a entrevistar. La oferta se complementa con inserciones publicitarias en un medio escrito local y en la propia emisora. Por último, aclara la emisora en su oferta que... ¡aplican un descuento al precio tarifa!.
Imagino que hay que sacar dinero de debajo de las piedras, pero me parece curiosa la comercialización de las noticias, el mercadeo de la actualidad. La emisora se plantea dar cobertura al acto... si los organizadores les pagan un pastón. Resultado final: la asociación declinó la oferta... pero ningún periodista de la emisora se acercó a la jornada. No se dijo en antena una sola palabra. Y eso que había cargos públicos del Gobierno autonómico. Ni por esas.
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