España ha perdido hoy a uno de los grandes protagonistas de nuestra historia, aunque hace tiempo que lo perdimos, cuando el Alzheimer comenzó a devorar su vida y sus recuerdos. Jordi Solé Tura ha fallecido esta mañana a los 79 años. Destacó por su lucha antifranquista en las filas del PSUC, militó después en el PSC, fue senador, miembro de la ponencia que se encargó de redactar la Constitución de 1978 y Ministro de Cultura en uno de los Gobiernos de Felipe González. Paralelamente desarrolló la actividad docente.
En diciembre de 2007 se conoció que padecía Alzheimer (diagnosticado tres años antes). Su hijo Albert anunciaba entonces la realización de un documental, dirigido por él y titulado Bucarest, la memoria perdida. Narra la búsqueda personal de sus raíces, marcadas por el doble exilio de su padre: el provocado por su militancia antifranquista, que le obligó a vivir fuera de España, y el exilio interior -sin posibilidad de retorno- que significa la lucha contra el Alzheimer.
Un espléndido trabajo que ganó un Goya y que te recomiendo en este día en que los recortes de prensa, los vídeos de TV, el sonido de su voz en la radio y el documental de su hijo ya se han convertido en únicos soportes para explicar a las nuevas generaciones quién fue Jordi Solé.
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