Los tiempos cambian, la sociedad evoluciona, la puesta en escena en los informativos de televisión, también. Hace relativamente poco, todos los presentadores llevaban el lazo rojo en la solapa como signo de compromiso en la lucha contra el SIDA -personal, desde luego, pero sobre todo de la cadena-. Incluso las empresas sobreimpresionaban "moscas" con ese logo. Solidaridad aparente... y muchos reportajes y entrevistas para abordar la cuestión en profundidad (los menos) o para dar sensación de... (en la mayor parte de los casos). Seamos sinceros, el VIH no vende, no da audiencia.
Esta noche, los conductores de noticias de La 1 de TVE (Pepa Bueno), de Antena 3 (Matías Prats) y de Telecinco (José Ribagorda) han prescindido de ese signo externo.
Sin embargo, Iñaki Gabilondo lo ha incorporado a su elegante vestuario. No me ha dado tiempo a ver La Sexta. En Telemadrid también lo llevaban.
Descartado el acuerdo general de las cadenas para posicionarse este año de manera conjunta respecto al SIDA, no sé qué criterio habrá imperado en cada decisión individual. ¿Se da por supuesto el compromiso, sin necesidad de ponerse el lazo? ¿Parece cansino insistir en la cuestión a las nueve de la noche, cuando llevan todo el dia martilleando con el tema? ¿Es más cool no ponérselo?
¿O es que hay demasiados lazos que ponerse a lo largo del año, y éste ya está un poquito anticuado, comparado con otros -la violencia de género, el cáncer de mama, etc...- que permiten mostrar -a quien los lleva- que son super-super-super solidarios? ¿Hay lazos de primera y lazos de segunda?
La solidaridad es un frágil velero azotado por las tempestades de... la moda.
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