Tenía la mirada limpia, ha dicho alguien que conocía bien a Antonio Puerta. Saltaba a la vista. En las entrevistas que hoy y ayer rescatan las televisiones, se percibe con claridad su naturalidad, su sencillez, su buen talante. Se consideraba un hombre afortunado por jugar en su equipo de toda la vida. Iba a ser padre en un par de meses. Hoy he vuelto a llorar al verle dedicando un gol a su futuro hijo.A esta hora emite TVE-1 un "Especial Antonio Puerta", elaborado con material emitido en los informativos durante las últimas noventa y seis horas (con inteersantes entrevistas, como por ejemplo a Pedro Berruezo hijo). Ha sido una buena y oportuna decisión de programación.
A Puerta le han concedido la Medalla de Oro al Mérito Deportivo, pero ya ha alcanzado la categoría de HÉROE POPULAR. Por supuesto en Sevilla, donde ya le han comparado con Paquirri.
Otros muchos futbolistas han fallecido en circunstancias trágicas (Juanito, Rivera, Mágico González...) pero muy pocos reunieron las circunstancias personales y profesionales de Puerta. Quizá Berruezo, otro sevillista que iba a ser padre cuando murió fulminado en el estadio de Pasarón. Pero aquel Sevilla no había ganado cinco títulos en año y medio. El de Puerta, el futbolista de la mirada limpia, sí.
Sevillista hasta la muerte. Ha dejado un gran vacío.
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