jueves, 25 de septiembre de 2008

"LOS PERIODISTAS HEMOS PERDIDO LA AUTOESTIMA"

Magis Iglesias, nueva presidenta de la FAPE (Federación de Asociaciones de Periodistas de España), hoy en EL PAÍS:

"Los periodistas hemos perdido la autoestima".

"Podemos terminar haciendo periódicos de breves sobre breves: perderemos nuestra capacidad de análisis y conseguiremos que el rigor parezca una excentricidad".

"La superficialidad como modo de aproximarnos a los hechos..."

"Hay que ir a la calle, hablar con la gente, contar qué pasa. Pero la gente está en las redacciones, recibiendo teletipos, mirando las páginas web, y menos en contacto con la realidad".

"Estoy obsesionada por la verificación de las informaciones, y me eriza la piel comprobar que eso es cada día más difícil".

"Las redacciones se organizan cada vez más desde la técnica que desde la calidad, y vale más la audiencia que lo que se cuenta. Las empresas se quedan en la superficialidad, y eso puede afectar de manera radical a la calidad de la prensa escrita".


Siendo cierto, que lo es, me parece una argumentación sólo políticamente correcta. Da la sensación de que el ejercicio del periodismo no se enfrenta hoy día a gravísimos problemas de precariedad en el empleo, subordinación de muchos profesionales a los intereses empresariales o políticos de los propietarios o gestores de los medios, reducción del espacio dedicado a la información en televisión, manipulación e intoxicación informativa desde ciertos públicos, intrusismo por parte de pseudo-informadores de magazines de actualidad que arrasan por donde van, sustitución de los contenidos de calidad por contenidos "populares", olvido en la misión primordial de formar lectores, oyentes o espectadores críticos, etc...

1 comentario:

Anónimo dijo...

Efectivamente, eso es lo que pasa, pero hay que ir a la causa, por qué se quedan en lo superficial o es imposible a menudo conocer la verdad; hay que destapar la realidad, el porqué, esos intereses empresariales y esa manipulación desde el poder de los propietarios de los medios, y sus secuaces.

Y las consecuencias: ciudadanía engañada, ignorante, frívola con la realidad...

y en fin, el país que se está forjando...