jueves, 4 de octubre de 2007

HA MUERTO CARLOS LLAMAS

Llevábamos arrastrando la tristeza del desenlace inevitable desde hacía semanas, y aún así se hace raro pensar que no sólo Charly no está, sino que no estará nunca más. Peleó sin éxito contra el cáncer. Con cincuenta y dos años.
No me extenderé en panegíricos sobre su calidad profesional y humana. Sólo quiero destacar su carácter de periodista de raza, no neutral, no faccioso, que no ocultaba ni sus posiciones ni sus ideas. Con una gran honradez intelectual.
Un ejemplo a seguir para quienes trabajan como periodistas y defraudan con frecuencia lo que Charly significaba, y que hoy recuerdan sus compañeros y amigos de la SER: rigor y lenguaje llano, sin eufemismos, en sus informaciones; socarronería y respeto en sus opiniones; cuestionar todo; con escepticismo; con valentía crítica; y al final, desdramatizar todo, porque la vida sigue y nada es tan importante, nada es más importante que la gripe de nuestros hijos. A Carlos le gustaba la vida.
En la radio merece un lugar de honor como uno de los grandes comunicadores de todos los tiempos, y deja un hueco fácil de llenar pero imposible de igualar.
Hay una sola forma de nacer, y muchas formas de morir. La de Carlos Llamas es, por desgracia, demasiado frecuente en nuestra sociedad.
Demasiadas personas se me han ido en este año 2007. Y aún quedan tres meses. Maldito 2007.

1 comentario:

Anónimo dijo...

stoy de acuerdo. cuando staba en antena no me acostaba sin escucharle, al menos alguno de los tramos. era independiente y tenia sentido del humor. dos virtudes que faltan en esta sociedad deteriorada en que vivimos.
le echaré de menos